Orgánicos:
Aumento de la elasticidad y movilidad articular. Mayor coordinación, habilidad y capacidad de reacción.
Ganancia muscular
La cual se traduce en aumento del metabolismo, que a su vez produce una disminución de la grasa corporal
Desarrollo de la fuerza muscular que a su vez condiciona un aumento de la fuerza ósea (aumento de la densidad óseo-mineral) con lo cual se previene la osteoporosis
Cardíaco:
Se aprecia un aumento de la resistencia orgánica, mejoría de la circulación, regulación del pulso y disminución de la presión arterial.
Pulmonar:
Se aprecia mejoría de la capacidad pulmonar y consiguiente oxigenación.
Cardiovascular: Disminuye la frecuencia cardiaca y la presión arterial, mejora la eficiencia del funcionamiento del corazón y disminuye el riesgo de arritmias cardiacas (ritmo irregular del corazón).
A nivel pulmonar:
aumenta su capacidad, el funcionamiento de alvéolos y el intercambio de gases, y mejora el funcionamiento de los músculos respiratorios.
Metabólico:
Disminuye la producción de ácido láctico, la concentración de triglicéridos, colesterol y LDL (colesterol malo), ayuda a disminuir y mantener un peso corporal saludable, normaliza la tolerancia a la glucosa (azúcar), aumenta la capacidad de utilización de grasas como fuente de energía, el consumo de calorías, la concentración de HDL (colesterol bueno) y mejora el funcionamiento de la insulina.
De la Sangre:
Reduce la coagulabilidad de la sangre
Neuro-endocrino:
Disminuye la producción de adrenalina (catecolaminas), aumenta la producción de sudor, la tolerancia a los ambientes cálidos y la producción de endorfinas (hormona ligada a la sensación de bienestar).
Del sistema nervioso:
Mejora el tono muscular, los reflejos y la coordinación.
Gastrointestinal:
Mejora el funcionamiento intestinal y ayuda a prevenir el cáncer de colon.
Osteomuscular:
Incrementa la fuerza, el número de terminaciones sanguíneas en el músculo esquelético, mejora la estructura, función y estabilidad de ligamentos, tendones y articulaciones, previene la osteoporosis y mejora la postura.
Psíquico:
Incrementa la capacidad de fuerza de voluntad y de autocontrol, disminuye la ansiedad, el estrés, la agresividad y la depresión, estimula la creatividad, la capacidad afectiva y mejora la memoria y autoestima de la persona